domingo, 30 de diciembre de 2012

LA OBRA PLASTICA DE DAIRO BARRIOSNUEVO (4)



El Gran Torres. Dibujo a lápiz de color 50 X 70 cms.


LA NARRATIVA DEL BAILE POPULAR SEGÚN LA OBRA DE
BARRIOSNUEVO

Por Manuel Guillermo Ortega (Guillermo Tedio)*


Después de una larga búsqueda por los caminos de los tópicos o motivos populares, Dairo Barriosnuevo (de Guaranda, Sucre, Colombia) ha llegado a una estética pictórica del mundo de los cuerpos que giran alrededor de la música, en las verbenas o bailes populares. Sus dibujos y pinturas se han instalado en ese abigarrado universo que se mueve en torno del fenómeno del pickup (picó) o estruendosos y monstruosos equipos de sonido, con bafles y parlantes gigantescos que en Barranquilla  y Cartagena, la gente conoce con nombres y eslóganes igualmente pantagruélicos: El Coreano (soy el número uno), El Gran Freddy (la revelación del momento), El Gran Pijuán (el papá de los grandes), El Dragón (sonido verdadero), El Sibanicú (el que prefieres tú), El Solista (el que llena la pista).

El Gran Freddy. Dibujo a lápiz de color 50 X 70 cm.



El Dragón. Dibujo a lápiz de color 50 X 70 cm.
 

Sadid Ortega Pérez, competente investigador en esta temática de las verbenas populares, anota:


“en la clase popular y parte de la clase media, el picó representa el alma de la fiesta. Otros sectores lo consideran un rey al que hay que rendirle tributo, y los sectores más fanáticos creen que él picó es una divinidad, un dios cuyos seguidores o fieles devotos lo siguen en cada presentación como si se tratara de un ritual o una penitencia”


Y agrega:

“el picó congrega a sus seguidores como por arte de magia. Cuando comienza a sonar, empiezan a llegar los bailadores de todas partes, atraídos por ese trepidar cadencioso que les penetra todo el cuerpo y les hace hervir la sangre. Ya no es el tambor el que los convoca, a la usanza de los primitivos abuelos africanos. Ahora en estos tiempos modernos, el que reúne la tribu es el picó”



El Coreano. Dibujo a lápiz de color 50 X 70 cm.


El Sibanicú. Dibujo a lápiz de color 50 X 70 cm.


En el dibujo y la pintura de Barriosnuevo se entrega una vocación narrativa. Todo dice y relata en el imaginario pictórico de este artista sucreño trasladado a Barranquilla desde 1977. Cuentan sus rostros, sus gestos, su ropa, el amontonamiento, las mujeres que acompaña ese mundo masculino en el que los jóvenes de los barrios populares se ponen a prueba en una especie de duelo del cuerpo, en los compases cadenciosos de un ritmo desenfrenad que nos lleva al mulataje, a lo negroide. Las figuras de Barriosnuevo son jóvenes que parecen estar en un trance litúrgico, en comunicación con una divinidad que seguramente tiene sus raíces en el África ancestral. Mientras unos bailan, los otros observan en espera de su turno de la danza, con el fondo de los monumentales picós de colores abigarrados e imágenes que recrean un ambiente o paisaje a veces idealizado, lejano y exótico, de dragones, cobras, y escenas bucólicamente tropicales, y otras, de tanques de guerra y personajes como Fidel Castro y el Che Guevara.



El Gran Pijuan. Dibujo a lápiz de color 50 X 70 cm.

Barriosnuevo ha creado una estética de lo bajo y lo feo, elevando manifestaciones populares de baile y música a un arte que logra transmitirnos la fuerza vivencial de un universo barroco y chillón donde la violencia contenida en los cuerpos se entrega a movimientos rítmicos catárticos, al son del sonidobestial de los picós.

El Solista. Dibujo a lápiz de color 50 X 70 cm.



Dairo Barriosnuevo: Artista Plástico.

Bibliografia:
La Casa de Asterión. Revista trimestral de estudios literarios Volumen V - Número 20, Enero – Febrero Marzo de 2005
Revista Dominical de El Heraldo, Barranquilla 01.03.2009. Pag.12
Fotografía: Salwa Amastha, archivos de Fukafra

*Profesor de Ciencias Humanas de la Universidad del Atlántico

martes, 25 de diciembre de 2012

“LOKASSA YA MBONGO EN BARRANQUILLA”

Matilde Herrera recibiendo al maestro Lokassa Ya Mbongo
 
Por Dairo Barriosnuevo*
El viernes 13 de agosto de 2010, nos estuvo visitando un importante artista de la música popular africana, se trata nada menos que de Lokassa Kasia Denis, más conocido en el mundo de la música internacional como Lokassa Ya Mbongo, cuya rueda de prensa se pudo efectuar en La Fundación La Cueva de Barranquilla, y gracias a la gestora cultural Lina Robles, quien nos facilitó este importante espacio, precisamente, para la promoción del concierto musical que se llevaría a cabo al día siguiente en el parqueadero del estadio Metropolitano Roberto "Flaco" Meléndez.

William Guzmán, Sidney Reyes y Lokassa Ya Mbongo
                                            

La Fundación Kusuto, en cabeza de los hermanos Ariel y Javier Cáceres, de igual forma el compañero y amigo de investigación étnica Cho Mane Hernández, quienes cordialmente, me solicitaron que hiciera parte del equipo de personas para hacer el debido recibimiento al maestro Lokassa. La primera tarea que me solicitaron fue preparar unos boletines informativos para la prensa escrita local, acerca de lo que este ídolo de la música popular africana significaba y representaba para un importante sector o público melómano como el de la ciudad de Barranquilla.
 

Evento realizado en el parqueadero del estadio Metropolitano, año 2010
 
En primera instancia, el grueso de público seguidor de la música de Lokassa se encuentra en los estratos sociales más humildes y pobres, no sólo de esta ciudad, sino de las periferias de Cartagena, Santa Marta…porque es precisamente allí, a donde llegan y suenan los éxitos musicales de este artista, al igual que otros músicos y orquestas de origen africano y que gracias, a los enormes equipos de sonido (sound system) llamados pickup o picós, de estas importantes ciudades de la región Caribe colombiana, durante las últimas cuatro décadas, y que son los únicos y verdaderos divulgadores de este importante ritmo de música congoleña llamado Soukous, entre otra gran variedad de ritmos correspondientes a otros países igualmente africanos, como en el caso del Highlife de Nigeria, El Makossa de Camerún, El Luo y Benga de Kenya…entre muchos otros.
 
Un aspecto curioso por no decir extraño en todo este asunto de la música popular, y es que de alguna manera, evidencia, lo que siempre hemos dado a conocer no sólo a través de textos y publicaciones como el presente, sino a través de nuestras conferencias, y que por años, hemos venido realizando el equipo de investigadores de Fukafra, los compañeros Nicolás Contreras, Sadid Ortega, Nelson García, Walter Hernández, entre otros ponentes, muy a pesar, de la enorme acogida que ha tenido la música africana, especialmente, donde integra el músico Lokassa Ya Mbongo, siendo este, tan popular y significativo para estos sectores, comunidades y pueblos, me permito el atrevimiento y/o la osadía, de afirmar que hasta casi comparable con la enorme producción de músicos locales, como el Joe Arroyo y Diomédes Díaz, para sólo citar dos ejemplos. Lo que resulta increíble, es, que la prensa local oficial, no tuviera ni idea, la hora de su visita a esta ciudad, mucho menos ¿de quién era este personaje? ¿y que tipo de música tocaba e interpretaba?
 
Algo está pasando con aquello de los circuitos alternos, con las culturas emergentes, con los nuevos fenómenos de tribus urbanas contemporáneas, y otras manifestaciones, que siempre han estado ahí, pero que hasta ahora, no han sido oficialmente reconocidos, y que siempre han sido invisibles, marginados y soterrados, no desde ahora, desde hace ya muchos años. En el caso Lokassa Ya Mbongo, Bopol Mansiamina, Diblo Dibala, Pablo Lubadika, Dally Kimoko, para solo destacar una serie guitarristas, grupos y orquestas del mundo africano congoleño, los cuales están sonando su música en el mundo, desde las décadas de los 70, 80 y los 90.
 
La rueda de prensa con Lokassa Ya Mbongo estaba programada para las 9:00 de la mañana, y aunque el artista, tenía que desplazarse desde la ciudad de Cartagena, muy a pesar, de que la rueda de prensa, fue de divulgación restringida, ya un grupo de personas (fans) estaban preparados esperando, desde tempranas horas de la mañanas, no dejaba de preocupar, el hecho, de que se nos viniera mucho personal, y el recinto de La Cueva, quedara hacinado, pequeño, al momento de llegar el artista.
 
Pasaban las horas y crecía la ansiedad de saber sobre el arribo de Lokassa. En los pasillos de La Cueva, por ejemplo, crecía el rumor, de que al artista, no le había gustado el planchado de su traje, entonces, había que esperar hasta cuando nuestro invitado Lokassa estuviera cómodo y a gusto. Ya era medio día y nadie de los allí, presentes, se atrevía ir a almorzar, porque podía perderse el gran acontecimiento histórico y social de la llegada De Lokassa, ¿y porque no? Hasta tomarse la foto con el artista, para de inmediato, subirlas a las redes sociales y compartirla, que la imagen lo diga todo, por sí sola, el hecho, de poder conocer a Lokassa de carne y huesos, lo que para muchos resultaría una hazaña. Perder esa oportunidad implicaba seguir viendolo por medio de las portadas de los discos, fotos y vídeos del Internet.
 
De antemano, ya se sabía que la gran artista africana Mbilia Bel, quien compartiría la tarima con Lokassa durante el concierto, no podía estar presente y hacer parte de la rueda de prensa, porque apenas se encontraba en el aeropuerto de Bogotá con destino a Cartagena.
 
Mbilia Bel y el productor audiovisual Lucas Silva
      

Como a eso de la 1:00 de la tarde, por fin llega Lokassa, y viene en uno de los carros que hacen una caravana. Desde una camioneta que trae los vidrios ahumados vienen saliendo personas, entre los que se encuentra el empresario de espectáculos de baile Álvaro Gómez, hasta que uno de ellos, era Alex Boicel, lo anunciara con el reconocido y acostumbrado anuncio de las canciones: señoras y señores ¡¡¡Lokassaaa Yaaa Mbongooo!!!
 
Y por fin, de una manera estelar aparece ante los allí presentes, el inconfundible y singular personaje, elegantemente vestido, con fino traje entero y despojándose de sus gafas negras, y con la enorme sonrisa que le caracteriza y abriendo los brazos al público, el que de inmediato, le respondió yéndosele encima, para abrazarlo y tocarlo, estar a su lado ante las ráfagas de los flashes.
Lokassa Ya Mbongo a su ingreso a la Fundación La Cueva

Ahí tenía enfrente, a uno de los músicos que nos hizo bailar con su música, en los bailes de verbena, desde que eramos unos jóvenes adolescente, y que nos hizo mostrar nuestras dotes de grandes bailarines de los 80s, su música nos acompaño siendo programador picotero, actualmente, la escuchamos y seguimos disfrutando de sus bellas melódias, las cuales sus manos, digitan de manera magistral.
 
Pues bien, no sólo tuvimos la oportunidad de conocer al maestro Lokassa, sino que tuvimos el privilegio, de conversar e interactuar con el gran músico, y lo hicimos, por medio de la traducción de estudiante de la Alianza Colombo Francesa, el cual se encontraba entre el público asistente durante la rueda de prensa, joven, que sirvió de puente para resolver los graves problemas de comunicación que teníamos, pues, Lokassa, no habla español y aunque vive en Estados Unidos, apenas domina algunas palabras del inglés, solo habla y domina el francés.

Lokassa en plena rueda de prensa

Durante la rueda de prensa algunos de los asistentes le preguntamos acerca de su producción musical, especialmente, sobre discos que él ya consideraba viejos y que ya no interpretaba.
 
Nos hizo saber acerca de la historia de la música africana y su impacto en Europa y Estados Unidos y el mundo en general, luego nos hablo de su particular guitarra, nos decía que él mismo le mandaba a poner las cuerdas, las cuales tenían una acústica especial para su oído como artista músico.
 
Entre las muchas preguntas que le hicieron la periodista de El Heraldo: Martha Guarín, le pregunto si conocía a nuestra cantante colombiana Shakira y contesto que la había oído nombrar, pero que definitivamente no.
 
Incluso, Lokassa con una improvisada guitarra, no de su propiedad, hizo una pequeña muestra de su habilidad técnica, tocando para nosotros unas melodías de su antiguo y extenso repertorio, a medida que interpretaba la melodía, los allí presentes identificábamos el nombre de cada tema musical. Como quien dice, tuvimos nuestro propio mini concierto interactivo y privado, en la Fundación La Cueva con el maestro Lokassa, quien en más de una ocasión, corrigió los títulos de las canciones al auditorio, pues, aquí en el Caribe colombiano, le aplicamos lo que denominan un Piconema (Falso nombre, para identificar los temas musicales) Gracias, a que son canciones venidas en otros idiomas, especialmente de origen africano, algunas el francés, inglés y portugués, y eso él, lo entiende perfectamente.
 
Después de la rueda de prensa Cho Mane Hernández y este servidor, nos sumamos a la caravana que lo acompañaba a su agenda promocional del concierto.
 
Llovía intensamente en Barranquilla y Lokassa pudo apreciar los enormes y feroces arroyos de esta ciudad, mientras que nosotros a su lado, conversamos.
 
Alex Boicel, Dairo Barriosnuevo y Lokassa Ya Mbongo

Después de salir de aquella inolvidable rueda de prensa, y recibir cátedra, acerca del mundo de la música africana y de las experiencias y las actuaciones musicales de Lokassa, me pareció importante, que supiera un poco sobre el impacto e influencia de él, como músico y su música en la ciudad de Barranquilla.                

A Lokassa le hice saber que hace algún tiempo, aquí en Barranquilla, quizás 5 ó 6 años, se corrió la lamentable noticia de que había muerto, pero que afortunadamente, solo fue un rumor, y se debió, a que de él, ni de sus producciones musicales, no teníamos ninguna información, estábamos incomunicados. Hasta hubo locutores de radio especializados en esta música, que se atrevieron dar la noticia de su deceso, evidentemente, sin haberlo confirmado.
 
Lokassa, escuchando se pasaba la mano por la cabeza con una cara de asombro decía: “no death no.” También le comente, que hace más de diez años, en la localidad del sur occidente de Barranquilla, hubo una pandilla de muchachos verbeneros, seguidores de picós y por supuesto de su música, y como en los casos de la cultura urbana y violenta de Jamaica, los denominados Rud Boys, este grupo de champetúos, se hicieron llamar los Lokassa Ya Mbongo. Lo curioso del asunto es, que estos muchachos, son de muy baja escolaridad, a duras penas saben pronunciar su nombre, y mucho menos, saben escribirlo.

Le comente a Lokassa, sin temor a equivocarme, que a él, como persona o músico, no lo conocían tanto, como a su música misma, incluso, su música, es mucho más importante y conocida en esta ciudad, que la de muchos otros artistas de la música internacional y local, incluso, que muchas de las estrellas de la música salsa y que lo podemos demostrar inventariando la serie de sus éxitos, disco por disco, que durante décadas, ha sonado y no dejan de sonar en Barranquilla. Que tiene un variado público seguidor que cubre todas las generaciones: niños, jóvenes, especialmente, arraigados en los adultos y gente mayor, en fin, todas las edades, que a pesar de los años, lo hace para esta ciudad un personaje vivo y de una gran vigencia.

Después de un receso en el restaurante del Fabio Pobeda (QEPD) su paso por el canal regional de Telecaribe y más tarde por la emisora de radio Olímpica, hemos podido comprobar, que el fenómeno de la música de Lokassa Ya Mbongo en la ciudad de Barranquilla, es una toda una realidad.        

La estelar presentación de Lokassa Ya Mbongo en Barranquilla
 

Fotografía:
Matilde Herrera, Sidney Reyes, Juan Carlos Rodelo, Lucas Silva, Alex Alemán, William Guzmán y por supuesto, los archivos de Fukafra.
*Artista plástico e investigador cultural